New language?

Language education allows students/people to have a better understanding of other people’s thoughts, feelings and cultures. It generates a greater capability of comprehension of different realities, tolerance and respect for the human being as well as a better knowledge of the world.

Education - Development - Universe - Technology - Environment - Culture - Humanism - Society - Interaction - Time - Experience

Interactivity & Interaction in Online Courses

Interactividad e interacción en ambientes virtuales de aprendizaje



Muchas veces se dice que un curso tiene actividades interactivas, sin embargo estas no se refieren a actividades de interacción entre personas. Tanto la interacción como la interactividad mediada por las tecnologías de la información y la comunicación se dan en las aulas virtuales de aprendizaje. Los conceptos considerados aquí son:

Interactividad

Como señala Fainholc, B. (2004), la interactividad se refiere a la relación entre el alumno o el tutor con los recursos tecnológicos y materiales educativos creados para un determinado contexto educativo, que puede o no hacer posible la comunicación oral o escrita entre personas (interacción).
Aquí se considera como interfaz a la plataforma de educación a distancia (e-learning) en la cual el alumno realiza todas las actividades curriculares, de autoevaluación y evaluación; desde la cual también accede a blogs, wiki, sistemas de videoconferencia, grupo de español en Facebook1, etc. (Díaz, S., 2009). La necesidad de acceder vía plataforma es debido a que desde ella administra el trabajo del alumno por el cual es calificado.

Interacción

La interacción socio cognitiva (que incluye valores, creencias sociales, culturales etc.) en ambientes virtuales se refiere a los actos comunicativos entre las personas, sea ésta sincrónica o asincrónica y que es facilitada por la interactividad de los recursos tecnológicos-informáticos utilizados (Fainholc, 2004).
La interacción entre alumnos es fundamental para el desarrollo de destrezas comunicativas. La negociación de significados que se realiza en las conversaciones promueve un input y un output comprensible al realizarse ajustes, reformulaciones, lo cual promueve la adquisición de la lengua (Long, 1985). Hatch (1978) señalaba que se aprende a conversar manteniendo conversaciones.

En la interacción oral, los interlocutores influyen unos sobre otros y negocian; el flujo comunicativo existente es bidireccional y multidireccional (Cantero, 1998). La lengua oral es diferente a la escrita (Martin Peris, 1991); en la producción oral, el emisor debe pensar lo que decir, decirlo, comprobar que lo ha dicho bien y que fue entendido en un muy corto período de tiempo (Giovannini et al., 1996). Los alumnos deben sentir que tienen control de la ituación comunicativa y para esto, necesitan conocer estrategias y desarrollar la competencia estratégica (Canale, 1983; Canale y Swain, 1980). Esto les permitirá resolver algunos inconvenientes que pueden surgir, por ejemplo: olvidarse de algo, equivocarse, corregir errores mientras se habla, pedir ayuda al otro  alumno que participa del diálogo o debate. Los alumnos necesitan usar la lengua para poner en práctica esa serie de estrategias que le permitan llevar a cabo el acto comunicativo, comprender el discurso, saber cuándo intervenir o ceder el turno en el momento necesario o adecuado en una conversación.

Las conversaciones deben tener un sentido para los alumnos. Es por esto que desde un comienzo, los alumnos deben conocer los objetivos de las tareas que les serán propuestas, de forma que puedan ir entendiendo la utilidad que ese aprendizaje tendrá para ellos.

Se trata de que en la interacción entre los alumnos y el profesor, los primeros no se retraigan porque no sepan expresarse bien, o pronuncien mal sino que se animen a expresarse, justamente para aprender a hablar en diferentes situaciones comunicativas, ya que la única forma de corregir o reparar errores es hablando (Poyatos, 1994a). El hecho de tener que organizar lo que van a decir, cómo decirlo y cuándo en un determinado momento no es sencillo; por esto el alumno necesita incorporar algunos sonidos, palabras, expresiones para rellenar esos instantes en que precisan pensar para poder seguir hablando (ejemplo: bueno, como decía…,bien…, e:::, a::::, mm…, tos, etc.) y que no son iguales al inglés.

En referencia al desarrollo del conocimiento gramatical a través de la interacción, Ellis (1984) argumentaba que en ésta, el alumno realiza inferencias sobre lo dicho aunque no conozca ciertos elementos lingüísticos del mensaje, modifica su discurso y usa sus conocimientos previos y por lo tanto, es a través del significado que el alumno puede descifrar el código lingüístico. Eso es posible usando videoconferencia, de otra forma no sería posible negociación alguna.

Entonces, en cada acto de habla el alumno debe comprender el significado del código lingüístico expresado por otro alumno, inferir lo que no se dice pero sí se quiere comunicar (principio de cooperación de Grice12,1975) y determinar eficazmente qué información es relevante en el discurso y que facilita su interpretación, para esecontexto en que se produce, (principio de relevancia de Sperber y Wilson (1986a,
1986b). Y esto es posible si se utiliza la videoconferencia para interactuar y comunicarse oral, verbal y no verbalmente, cara a cara. Los alumnos no sólo deben saber si lo que se dice es gramatical y lexicalmente posible, de uso frecuente y apropiado para un determinado contexto de uso, sino que en un acto comunicativo oral, deben reconocer el propósito del discurso (Hymes, n.d.). El hecho de que los alumnos tengan asumido que comparten determinados conocimientos y actuén unos sobre otros, negociando significados, es algo muy complejo y para esto cada uno debe cooperar. En un debate, en general, los alumnos muchas veces tratan de imponer sus opiniones, con lo cual la cooperación para negociar puede ponerse en riesgo; como señala Widdowson (2007), no sólo el significado es negociado en una comunicación sino las relaciones humanas.

A través del uso oral de la palabra entre diferentes alumnos, se pueden desarrollar relaciones interpersonales (Calsamiglia y Tusón, 1999), cuya armonía dependerá de las estrategias de cortesía que utilicen los alumnos en los actos comunicativos (buscar acuerdos, negociar, no presuponer, dar razones, mostrar interés, pedir disculpas, dar o solicitar la información necesaria, no ser ambiguo, no ser irónico, agradecer); un comportamiento positivo estimula la relación interpersonal entre alumnos.